Las empresas abulenses apuestan por la innovación y el mercado global para proyectar a la provincia
Iberaval afirma que éste es el mejor momento para invertir y crecer en el tejido empresarial local
Pisonero anima a los emprendedores de Ávila a luchar por su futuro, porque las empresas que avancen, surgirán a partir de su empuje
Ávila vive un momento clave para su desarrollo empresarial. Desde pequeñas empresas familiares hasta grandes proyectos internacionales, los empresarios de la provincia están demostrando que la combinación de innovación, inversión y apoyo institucional puede abrir puertas incluso en mercados altamente competitivos. En el marco de la jornada Financiación y crecimiento empresariales en Ávila, organizada por Promecal Ávila e Iberaval, destacados líderes del sector empresarial y representantes de instituciones financieras analizaron los retos y oportunidades de este contexto. Pedro Pisonero, director general de Iberaval, ha sido contundente: «No va a haber mejor momento para invertir en los próximos cinco años».
INNOVACIÓN COMO MOTOR DE CRECIMIENTO
Uno de los casos más inspiradores es el de Teodosio del Caño, director técnico de Onyx Solar, empresa abulense especializada en soluciones de construcción fotovoltaica. Su éxito radica en una visión innovadora, al igual que en su capacidad para competir globalmente con un enfoque local. «Hemos logrado vender incluso en China y trabajar en proyectos como un edificio en la Quinta Avenida de Nueva York, fabricado íntegramente en Ávila», ha explicado Del Caño, cuyo equipo está compuesto en un 85 por ciento por trabajadores de Castilla y León, la mitad de los cuales son abulenses.
Sin embargo, llegar hasta ahí no fue fácil. Según su testimonio, las dificultades para obtener financiación son uno de los mayores obstáculos para las empresas en España. «En este país puedes tener una idea brillante, pero los bancos no financian ideas. Sin instrumentos como las SGR -sociedades de garantía-, muchos proyectos no saldrían adelante», ha destacado, recordando el apoyo clave de Iberaval, que en 2009 le concedió 200.000 euros para impulsar su negocio, en sus primeros pasos como emprendedor.
PYMES QUE CONSOLIDAN EL TERRITORIO
Otro ejemplo destacado es el de Abel Sanz, propietario de una empresa familiar de neumáticos agrícolas que opera en Ávila, Medina de Rioseco y Peñaranda de Bracamonte, entre otros lugares. «Cuando los bancos no confiaron en nosotros por ser jóvenes, Iberaval nos dio el riesgo que necesitábamos para expandirnos», ha asegurado Sanz.
El respaldo de Iberaval no sólo resultó crucial para superar dificultades iniciales, sino también durante la pandemia. Gracias a préstamos COVID, la empresa pudo mantener sus operaciones y continuar generando empleo en la provincia. «El éxito de una empresa local es, a su vez, un éxito para toda la comunidad», ha remarcado este emprendedor, que hace apenas una semana ha recibido el Premio a la Mejor Empresa Joven de la revista Castilla y León Económica.
EL AGRO, EN LA PISTA DE DESPEGUE
Jesús Caro Moya, referente en el sector de los embutidos tradicionales, administrador de Ramón Caro SL, constituye otro ejemplo de cómo las empresas abulenses han sabido aprovechar su ubicación estratégica y el apoyo financiero para crecer. Caro ha señalado la importancia de la inversión en innovación: «Hemos modernizado nuestras instalaciones y procesos gracias a ayudas como los fondos FEDER gestionados por la Junta de Castilla y León».
La apuesta por la calidad y la tecnología le ha permitido a esta empresa familiar convertirse en una referencia nacional, respetando al mismo tiempo técnicas tradicionales. «Nuestro crecimiento demuestra que Ávila tiene todo lo necesario para atraer inversiones y competir a nivel global», ha afirmado.
ENTORNO EMPRESARIAL EN AUGE
Según los datos presentados por Pedro Pisonero, Iberaval ha registrado un crecimiento del 18 por ciento en las operaciones de financiación en Ávila este año, con más del 50 por ciento de los recursos destinados a proyectos de inversión. Estos números reflejan el rejuvenecimiento del tejido empresarial de la provincia y la apuesta decidida por el desarrollo local. Para Pisonero, el optimismo supone un factor clave en este momento: «Está mal visto ser optimista, pero las cosas están marchando razonablemente bien. El pesimismo no puede detenernos».
La provincia cuenta con recursos y un ambiente favorable para emprender, pero, según Pisonero, el verdadero cambio dependerá de las decisiones de quienes ya están en Ávila. «El desarrollo no viene de fuera. Las empresas locales son las que impulsan el progreso», afirmó, destacando la importancia del esfuerzo empresarial como base para una sociedad sostenible.
FUTURO CON OPORTUNIDADES
La jornada concluyó con un llamado a aprovechar el contexto actual. La baja de los tipos de interés, situados en torno al 4 por ciento, y el fortalecimiento de los programas de apoyo financiero representan una oportunidad única para las pymes abulenses. En palabras de Teodosio del Caño, «hay grandes técnicos en esta Comunidad, que ayudan a avanzar los proyectos», y puso como ejemplo al viceconsejero de Economía y Competitividad de la Junta de Castilla y León, Carlos Martín Tobalina.
Como afirmó Abel Sanz, «los márgenes que manejamos ahora no son los mismos de antes, pero este es el momento de ser optimistas». Jesús Caro Moya agregó que, con una buena combinación de apoyo institucional y estrategias innovadoras, Ávila cuenta con oportunidades, tras referirse a su emplazamiento junto a la A-6, en la estrategia de avance que su empresa ha planteado.
Ávila demuestra que el talento local puede competir en los mercados internacionales, a la par que incide en que la colaboración entre empresarios e instituciones, como Iberaval, es esencial para convertir las ideas en realidades. «Sin empresarios, Ávila no podrá avanzar. Pero juntos, podemos convertir esta provincia en un motor de desarrollo», ha concluido Pisonero, en la mesa redonda moderada por el director del Diario de Ávila, Pablo Serrano, y presentada por la directora de La 8 de Castilla y León Televisión, Patricia Carrera.